Terminados los rastrillos de Navidad, recogidos los puestos, guardamos las cestas y mesas expositoras para otro año.
Por nuestros stands han pasado numerosos voluntarios, sin ellos estos eventos serían imposibles. Les agradecemos de corazón su entrega y su entusiasmo.
Transformados en improvisados dependientes, cajeros, escaparatistas… contagian alegría y animan a los visitantes a llevarse a casa los productos que ellos mismos, con ayuda de los usuarios del Hogar y de los trabajadores, han ido confeccionando muchos meses antes. El resultado es muestra de su generosidad y por eso es un éxito.
El trabajo y la ilusión compartidos producen siempre una gran satisfacción. Y creer en una causa común, en nuestro caso los 114 chicos que apoyamos en el Hogar, son el mejor combustible. Algunos de ellos también han visitado el puesto que les representa, han visto su trabajo expuesto y han llenado de esa alegría tan característica suya el ambiente.
¡Gracias a todos los que os habéis acercado a vernos, os esperamos en próximas convocatorias!
Os dejamos el link a la publicación de la página enpozuelo. Muchas gracias a quién escribe y nos difunde.
(Los productos que no se vendieron, se llevarán a la (Los productos que no se vendieron, se llevarán a la Parroquia, ya os contaremos cuándo podréis verlos.)
No os olvidéis de nosotros, continuamos Siempre adelante!