Este es un tiempo alegre. Ha llegado el verano y estamos en plenas colonias de Cercedilla, nuestro pequeño paraíso.
La casa está más acogedora que nunca. Año a año mejoramos su accesibilidad, tratando de estar siempre a la cabeza de los tiempos, y esta temporada también los acabados, renovando en la medida de nuestras posibilidades los espacios, para que nuestros usuarios disfruten al máximo.
Hemos acometido varias obras: la cabaña nueva, el frontón, la recuperación el manantial y delimitar la propiedad con mojones para ajustarnos a la normativa de Medio Ambiente. También se han cambiado muchas camas, gracias a la generosidad de nuestros amigos benefactores. Ya han pasado varios turnos, varios hogares, por las colonias. Decenas de voluntarios de todas las edades y de distintas procedencias ha acudido a pasar unos días en convivencia con nuestros chicos. Y pensamos en lo diferente que se vive cuando todo se comparte, en comunidad, cuando todo se hace entre todos y cuando todo se hace por los demás.
Nos viene a la cabeza la lectura del Eclesiastés, “hay un tiempo para todo bajo el Cielo…” Ahora es el tiempo de Cercedilla, que no es más que de estar al aire libre, en un entorno saludable entre pinares, el tiempo de disfrutar con personas diferentes, el tiempo de flexibilizar horarios, de relajarnos y de improvisar… el tiempo alegre del verano que a todos nos gusta tanto, tan necesario y que nos hace tanto bien.
